jueves, 13 de agosto de 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
skip to main |
skip to sidebar
Trabajos
-
►
2014
(16)
- ► septiembre (1)
-
►
2011
(25)
- ► septiembre (6)
-
►
2010
(35)
- ► septiembre (2)
Pedido
Estás invitad@ a compartir lo que leas aquí, pero por favor, antes de publicarlo, contactate conmigo.
Etiquetas
amigas
amigos
amores
apuntes
arte
aves
blog
caminar
Cerri
ciencia
comer
cosas lindas de ver
cotidiano
cuentos
de otros
Dickens
el campo
elsa
escribir
escuela
estaciones
familia
fiestas
horacio
infancia
la amabilidad de los extraños
labores
lecturas
leer
lenguaje
libros
listas
lorenza
manifiesto
mar
margarita
mercedes
música
Napostá
obligaciones.
palabras
plantas
poesía
preguntas
prosa
Raimondi
recetas
recuerdos
reflexiones
sobrinas
sociales
socorro
sueños
tejer
tejidos
teresa
tiempo
trabajo
vacaciones
ver
viajes
Seguidores
Datos personales
Archivo del blog
-
►
2011
(25)
- diciembre (3)
- noviembre (1)
- octubre (2)
- septiembre (6)
- agosto (2)
- julio (3)
- junio (1)
- mayo (3)
- marzo (3)
- febrero (1)
-
►
2010
(35)
- diciembre (4)
- noviembre (6)
- octubre (3)
- septiembre (2)
- julio (3)
- junio (1)
- mayo (1)
- abril (3)
- marzo (6)
- febrero (3)
- enero (3)
-
▼
2009
(77)
- diciembre (2)
- noviembre (5)
- octubre (2)
- septiembre (10)
- agosto (5)
- julio (3)
- junio (6)
- mayo (5)
- abril (20)
- marzo (10)
- febrero (6)
- enero (3)
-
►
2008
(8)
- diciembre (3)
- octubre (1)
- septiembre (4)
5 comentarios:
dejátelas crecer pero ponele límites, como a los adolescentes!
A mí me dijo el peluquero el otro día que es mentira eso de que cortando después crece más fuerte, lo que hay que hacer es cepillarlas.
Ah, porque estimula la circulación.
Cepillarlas!!!!!!!
Por qué no se me había ocurrido antes!!!!
con permiso... disculpe la cursileria pero, por donde correrá la tinta?
Hay que dejar que crezcan y limarlas de vez en cuando para que no pinchen.
Publicar un comentario