un diario posible

martes, 5 de enero de 2010


Este año decidí empezarlo en la playa. Un año más despojado: poca gente, una comida simple, el agua del mar en los pies, las estrellas y los fuegos de artificio en un cielo negrísimo. A partir de esa noche y hasta hoy, muchos minutos silenciosos caminando por la playa y algunos versos que espero se transformen en algo lindo.





2 comentarios:

Ana Miravalles on 5 de enero de 2010, 9:21 dijo...

Buen inicio, Eva! un beso

Eva on 5 de enero de 2010, 11:07 dijo...

Gracias Ana!
Igualmente.
Un beso.