La luna creciente se transparenta
como una pastilla gastada
sobre la loba que amamanta
a Rómulo y Remo.
En el oeste
el día se apaga lento
en un resplandor anaranjado
todo se vuelve blanco
y árboles recortados.
Son el atardecer,
el otoño
melancólicos, dulces
celestes y amarillos.
lunes, 25 de marzo de 2013
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